Han pasado 11 días desde el regreso a la actividad del blog, la demora de la publicación de esta entrada se debe a que no me sentía lo suficientemente lúcido para escribir y por lo que veo es que la humedad del ambiente que viene en el verano es lo problemático, ya que durante los últimos días de la primavera y todo lo que lleva de este verano, no he descansado bien y por lo que veo, es que siempre me pasa lo mismo todas las épocas de lluvias, por lo que puedo decir abiertamente que detesto el verano, los huracanes y los cielos nublados y que por mí estaría perfecto vivir todo el tiempo en un clima otoñal o hasta invernal, ya que no hace calor y el clima se mantiene seco la mayor parte del tiempo, pero bueno, antes de pasar a hablar sobre el disco que está siendo publicado hoy, quiero mencionar que otra de las cosas que me impiden ser puntual con las publicaciones es que soy muy perfeccionista con mis reseñas y es difícil que quede satisfecho con lo que escribo, lo que me hace volverlo a escribir una y otra vez hasta que me agrade lo que escribí. Por otro lado, algo que posiblemente me ayude a ser más puntual es lo que estoy haciendo ahora que es elegir los discos con una semana o de mínimo unos 5 días de anticipación, lo que me complica menos a la hora de escribir una reseña, ya que evito este enfoque pragmático que resulta ser mucho más problemático en la práctica que enfocarme en un solo disco. En fin, espero que disfruten este discazo y espero que este fin de semana, el blog pueda ser actualizado una vez más para cumplir con la meta de 4 entradas mensuales.
Rusty Evans fue una figura muy interesante, ya que los inicios de su carrera se remontan al rockabilly y al folk, sin embargo, poco a poco fue adoptado el discurso contracultural de la época y también fue adoptando un nuevo sonido, que en este caso es la psicodelia y en 1966 sacó su primer disco de larga duración que básicamente fue un álbum conceptual que buscaba recrear la experiencia con el LSD, este disco fue Psychedelic Moods de The Deep, el cual se dice que fue el primer álbum en tener en su título la palabra "psicodélico" (esto puede ser cuestionable hasta cierto punto, pero no quiero ahondar en eso ahora). Psychedelic Moods presentaba un garage rock con muchas tendencias que yo denominaría como "proto-psicodélicas", ya que aún suena primigenio y tanto la ejecución amateur como la producción artesanal le dan un sabor más cercano al garage rock de mediados de los 60's, como sea, a pesar de ser un álbum relativamente ambicioso y experimental para su tiempo, no alcanzó a venderse, ya que además de que la disquera Cameo-Parkway hizo una pésima promoción, The Deep nunca fue un grupo formal, sino un proyecto formado por músicos de estudio, por lo que no hubo tampoco conciertos que lo promocionaran.
En 1967, tanto Rusty Evans como Mark Barkan y los músicos de sesión que habían tocado en el disco de The Deep decidieron firmar un contrato con Columbia para grabar un nuevo disco que sonara más psicodélico y más profesional, y otro de los cambios que acompañarían a este álbum sería el cambio de nombre del "grupo" a The Freak Scene. Psychedelic Psoul saldría justo en la época del Verano del Amor y sería un fracaso comercial al igual que su antecesor, por lo que Rusty terminó perdiendo el interés en el proyecto y relanzaría su carrera como cantautor de folk psicodélico y terminaría renombrándose como Marcus, su verdadero nombre y sacaría un disco en 1970, pero eso es otra historia que será contada en el futuro.
Psychedelic Psoul es un disco que al mismo tiempo que comparte varios elementos con su antecesor, tiene muchas mejorías importantes y esto lo hace consolidarse como todo un clásico de la psicodelia más subterránea, y es que en este disco no solo vemos a unos The Deep que pasaron de ser un grupo amateur y verde con una producción artesanal a un grupo profesional con una clara postura artística y contracultural que además de todo tiene una excelente producción, sino que estamos ante todo un clásico de la psicodelia más subterránea que presenta una propuesta que yo diría que suena bastante innovadora para su tiempo, teniendo en cuenta que muchos de los elementos presentes en este disco se convertirían en la posteridad como algo recurrente y habitual de escuchar en los discos psicodélicos de 1968 a 1975, por otro lado, algo que se me hizo muy interesante es que Rusty Evans no apostaba simplemente por la psicodelia y el discurso contracultural de la época, sino que miraba sin ningún prejuicio a la world music y al avant-garde, pero al mismo tiempo, las canciones de todo el álbum se mantienen accesibles, inteligentes y coherentes sin caer en ningún cliché estúpido y anticuado o en la masturbación pseudo-artística, lo que me parece un gran logro teniendo en cuenta que muchos discos de corte similar suelen terminar siendo directa o indirectamente parodias molestas de la psicodelia y la contracultura de los 60's, como mucho de lo que hizo Frank Zappa en su momento o incluso The Velvet Underground (aunque estos últimos de manera muy ocasional) o discos con mucha incoherencia de por medio.
El disco abre con A Million Grains of Sand, una icónica canción para los entusiastas de la psicodelia más underground de la época, y es que lo tenía todo para ser un gran éxito: era experimental, viajada e innovadora, sin embargo, el hecho de que el grupo no se consolidara como un grupo de conciertos hizo que este disco no entrara a las listas de popularidad, como sea, aquí estamos ante una verdadera obra maestra del estilo, pues aquí notamos que a pesar de ser de 1967, suena totalmente fresca incluso para la actualidad y también podemos notar la tendencia de Rusty Evans de abrazar a la música del mundo como parte esencial de su sonido, pues nos encontramos con una marcadísima influencia árabe que la convierte en una canción extremadamente rítmica y exótica al mismo tiempo que incluye varios efectos sonoros, entre ellos un parlante leslie en la voz (herencia de Tomorrow Never Knows), delay en la guitarra y cintas en reversa. Luego Rusty Evans, rebautizado como Marcus grabó una versión más pausada y larga que tenía una influencia más hindú e incluía cítara, tablas y tambura, que a mi gusto está al nivel de esta y muestra la adaptabilidad de esta obra a otros estilos, e igualmente el demo de 1966 (que lo pueden encontrar por el Youtube) muestra que originalmente era una obra más "dylanesca" en un principio. Obra maestra de principio a fin.
...When in the Course of Human Events (Draft Beer, Not Students) e Interpolitation: We Shall Overcome se trata de una sola obra que incluye atrás un ritmo repetitivo con reminiscencias de samba o bossa nova mientras que al frente encontramos todo un collage de consignas de marchas estudiantiles, una conversación sobre los tópicos políticos más importantes de la época y la canción We Shall Overcome de fondo, y a pesar de que este tema sea de los menos brillan en el disco, me sigue pareciendo un gran logro que un tema de "spoken word" con reminiscencias un tanto "zappianas" no suene aburrido o ridículo, por otro lado, cabe mencionar que la frase "Draft Beer, NOT Students!" fue una de las consignas de la época en contra del reclutamiento de jóvenes para llevarlos a la guerra de Vietnam, sin embargo, la frase se traduciría literalmente como "Cerveza de barril, NO estudiantes", por lo que pierde sentido, sin embargo, "draft" en inglés tiene muchos significados, entre ellos "barril" y "reclutamiento", por lo que es una frase irónica y al mismo tiempo de protesta.
Rose of Smiling Faces es otro de los temas que más me gustan de todo el disco y es que si A Million Grains of Sand resultó ser un experimento exitoso al combinar la psicodelia más viajada y experimental con la música árabe, este otro tema lo hace también de forma exitosa, pero esta vez es la música clásica de la India con una psicodelia hipnótica, lo que me hace pensar seriamente que aquí The Freak Scene suenan como una versión "light" de The Beat of The Earth, pues aquí está esa misma influencia hindú y de las guitarras del surf, pero con la diferencia de que aquí no hay ruidismo, ni sinfonismo, ni temas largos, e incluso creo que hay cierto paralelismo entre Rusty Evans y Phil Pearlman, teniendo en cuenta que ambos comenzaron tocando un derivado del rock and roll cincuentero (Rusty tocaba rockabilly y Phil surf) y terminaron involucrados en la psicodelia más viajada e igualmente ambos abrazaron a la contracultura de los 60's de forma muy seria, aunque con la diferencia de que uno terminó convirtiéndose en pintor y el otro terminó recluido en una granja al sur de California. Otra obra maestra.
Behind The Mind tiene ecos del sonido de San Francisco, especialmente de Jefferson Airplane y Quicksilver Messenger Service, aunque menos enfocado al aspecto guitarrero de la escena y más hacia el experimental, ya que algo que caracteriza a este tema es su uso de las cintas en reversa y el delay. Temazo, lástima que sea muy corto.
The Subway Ride Thru Inner Space suena como a una versión light de Eric Burdon y los Animales en el Winds of Change, ya que está esta composición ultra-psicodélica en el fondo mientras que Rusty Evans está haciendo alguna especie de Spoken Word, mientras que hay detrás una guitarra con influencia del surf que va haciendo unos arreglos muy extraños, lo que me hace pensar que el propósito de Rusty no era hacer solos al nivel de Jorma Kaukonen o de John Cipollina, sino jugar con los arreglos psicodélicos de una forma en que la guitarra sirviese más como un adorno que como un instrumento principal. Muy buen tema.
Butterfly Dream suena a Jefferson Airplane más experimental y menos guitarrero o a unos United States of America sin los efectos electrónicos de Joe Byrd. Otro muy buen tema que dura muy poco.
My Rainbow Life fue un tema que grabaron primero The Third Bardo, otro de los grandes grupos de la primera psicodelia o garage psych, el cual fue producido por Rusty Evans, aquí The Freak Scene la reviven aunque con un sonido más limpio, pero no menos viajado e hipnótico que el original, además de conservar esa influencia hindú que de alguna manera recuerda a los sanfranciscanos Mad River, pero sin las atmósferas disonantes y oscuras de estos. Obra maestra.
The Center of My Soul suena como unos The Art of Lovin' pasados de ácidos que además incluyen una armónica blusera que suena extremadamente psicodélica, por lo que yo supongo que debe tener algún fuzz o algo por el estilo, ya que suena extraña. Excelente pop psicodélico.
Watered Down Soul comienza como un blues rural completamente acústico para convertirse en una especie de soul en ácido con unos melismas de corte hindú que vuelven a remitir al Revolver de los Beatles y de nuevo, la guitarra de Rusty Evans vuelve a imitar de forma muy interesante a la cítara, mientras que también se incluyen una serie de efectos de estudio que no he podido identificar del todo más que algún líquido burbujeante. Temazo.
Red Roses Will Weep tiene cierta sonoridad española combinada con unos cantos medio gregorianos que recuerdan a los mejores Yardbirds pero con más LSD, ya que las voces incluyen un delay y un trémolo ultra-psicodélicos. Temazo.
Mind Bender es otro experimento extraño que vuelve a recordar a The Beat of The Earth, ya que aquí se incluyen unas guitarras que recuerdan a Phil Pearlman y sus ragas, mientras que Rusty Evans va haciendo algún tipo de spoken word mientras que la cantante femenina que ya habíamos escuchado en la mayoría de los temas, va haciendo alguna especie de Grace Slick "hinduizada" (si es que existe esa palabra) y por detrás hay algún ritmo de corte "latino" que se repite una y otra vez. Lástima que dure tan poco tiempo.
El disco cierra con Grok! un instrumental de un poco más de 1 minuto que otra vez suena a raga rock, pero con un montón de efectos que no puedo identificar, supongo que nunca lo haremos y que es un secreto de Mark Barkan. Temazo y excelente cierre.
Un disco que nadie debe perderse, aunque no lo recomiendo para los que apenas se están iniciando en la psicodelia, pues mientras que la mayoría comienza con lo más "estándar" que por lo general siempre va enfocado, ya sea a la guitarra o al órgano, mientras que aquí no hay un enfoque a un instrumento en específico, sino a la recreación de los viajes psicodélicos a través de la música, a pesar de la cortísima duración de la mayoría de canciones, pero definitivamente su carácter experimental y que tiene cierto "fetiche" por la música del mundo puede resultar un tanto difícil de digerir para algunos.
Postdata: Incluí un ripeo del vinilo original de 1967 que encontré por Soulseek y uno de la reedición en compacto de 1994. Lamentablemente, el ripeo del vinilo está en 16/44, sin embargo, creo que sigue siendo la mejor opción para los audiófilos, ya que la del CD suena un tanto aumentada en los graves y tiene cierta sibilancia en la voz, pero aún así la incluí por motivos más que nada, documentales.
2 comentarios:
Muchas gracias
Gracias¡
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