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13 ene 2024

Listening - Listening (1968)

 
Tengo una relación bastante antagónica con Rate Your Music, porque si bien, en principio podría parecer una buena idea, no lo es en absoluto y sé que aquí algunos de ustedes me podrían reprochar el hecho de que vaya a decir esto cuando tengo un blog de música, pero lo que está mal con Rate Your Music es precisamente la apertura que tiene el sitio a que cualquier persona pueda dar su opinión, y ustedes se preguntarán ¿Y qué tiene de malo que la gente pueda dar libremente su opinión? ¿No es acaso una democracia en acción? La respuesta es un rotundo NO, de hecho, para parafrasear a Platón en su "alegoría sobre la caverna", la opinión o doxa al estar basada en la creencia, la experiencia y la ilusión, no tiene un fundamento sólido y es precisamente lo que mantiene a los esclavos en su prisión, es decir, el ejercicio de opinar nos hace creer que efectivamente estamos ejerciendo algún tipo de democracia y por lo tanto, nos oculta que estamos siendo presos de creencias, ideas, ilusiones, mentiras y prejuicios sin fundamento alguno que no son más que una forma de reproducir a la ideología dominante y justificarla, y aunque esto les suene demasiado político a algunos de ustedes, la opinión es demagogia pura y no debería sorprendernos que de la opinión nazcan posturas tan despreciables y ruines como la anti-intelectualidad y el anti-intelectualismo, que aunque estén relacionadas, NO son lo mismo, pues por un lado, la anti-intelectualidad es cuando se desconfía y se niega rotundamente el ejercicio intelectual de ponerse a pensar, cuestionar y criticar, y el anti-intelectualismo es la desconfianza y el descrédito a los intelectuales, es decir, es una forma de anti-elitismo asquerosamente demagógica y populista que afirma que los intelectuales son una élite privilegiada que busca limitar nuestra "democracia" con su pensamiento y conocimiento, y es aquí donde uno debe poner a ambos como productos de la demagogia más descarada, así como cuando el escritor Isaac Asimov criticó a la sistémica ola de anti-intelectualismo que empezó en Estados Unidos en el Siglo XX, la cual solía afirmar que "mi ignorancia es igual a tu conocimiento", y la pregunta aquí es: ¿Qué tiene que ver todo esto con Rate Your Music?, la respuesta es bastante larga y compleja, por lo que esta introducción se alargará bastante:

En una serie de artículos que escribí en mi otro blog En el jardín del Guajolote pude hacer un cuestionamiento directo a los "expertos", a la tecnocratización de la industria musical y a la confianza excesiva que se les da a estos. El problema con el "experto" es que es un fetichista del conocimiento, para él lo que vale es este y nada más, tiene una excesiva confianza en la empiria y la práctica frente a la teoría, y esto le impide pensar y cuestionar tanto a sus conocimientos como a sus saberes y sus prácticas, por lo que el "experto" o "tecnócrata" también suele tener a menudo una postura anti-intelectual, ya que lo suyo no es pensar filosóficamente, sino siempre tener respuestas o en pocas palabras, el "experto" es un pervertido de acuerdo al psicoanálisis, y esto es precisamente lo que sucede con Rate Your Music, al abrir directamente sus puertas a que todo el mundo pueda opinar, dota al usuario de una confianza perversa en que todo lo que sabe y conoce es correcto, es decir, que él tiene la respuesta, entonces no es de extrañar que la misma plataforma brinde a los usuarios toda una experiencia subjetivista y que a la hora de que los usuarios sean cuestionados, justifiquen sus errores con falacias, pseudo-argumentos subjetivistas o relativistas o con la estupidez de "es mi opinión, respétala", no debería sorprendernos que muchas de las reseñas de discos raros, que se supone que están hechas por coleccionistas con amplias colecciones de discos, siempre tengan errores garrafales a la hora de etiquetar la música, ya sea con etiquetas completamente fuera de lugar o con otras basadas en los propios prejuicios de los usuarios, un ejemplo notorio es este disco de los bostonianos Listening, al que en dicha página se le suele etiquetar de "rock progresivo" o "proto-progresivo" y hasta hay gente que atrevidamente lo ha llegado a comparar con los grupos británicos del género, todo esto bajo la excesiva confianza de que sus sentidos les darán la respuesta correcta, y es aquí donde vale la pena citar al filósofo francés Gilles Deleuze cuando dijo que "los argumentos de la propia experiencia privilegiada son argumentos malos y reaccionarios" y esto es precisamente cierto cuando se les da una excesiva confianza a nuestros propios sentidos, como si se tratasen de herramientas infalibles para conocer y entender al mundo, cuando de hecho, son todo lo contrario, y aunque esto suene político, aquí su universalidad es aplicada a la música, pues escuchar música no es simplemente una práctica que implique directamente al oído, sino que implica también hacer un ejercicio intelectual y crítico que va más allá de lo que nuestros sentidos puedan decirnos.

Lamentablemente la información sobre Listening es de escasa a una en la red, lo que sí sé es que se formaron en Boston en 1967 por el virtuoso tecladista, vibrafonista, compositor y cantante  Michael Tschudin, el baterista y cantante Ernie Kamanis y el bajista Walter Powers, más tarde completaría la formación el guitarrista Peter Mallick (más conocido por ser un guitarrista de blues que formó parte de la banda de Otis Spann), durante su breve existencia que duró hasta 1969, el grupo fue uno de los más destacados de la escena de Boston junto con Ultimate Spinach, Ill Wind, The Freeborne, Beacon Street Union, Earth Opera, Ford Theatre, entre otros, y en 1968 lanzaron su debut y único disco titulado homónimamente del que hoy estamos hablando.

Listening es una obra que es uno de los mejores ejemplos de la psicodelia bostoniana, precisamente porque muestra la enorme diferencia que había entre la escena de Boston con las de San Francisco, Los Ángeles, Texas y Detroit, y es que los grupos de Boston se dedicaron más que nada a crear una psicodelia mucho más trabajada y cerebral en cuanto a las melodías y la ejecución, contrastando con lo garagero de Texas, lo crudo y pesado de Detroit y la enorme influencia del folk y el jazz que tuvieron las escenas californianas, y es por eso que Listening suenan tan finos y sesudos al mismo tiempo, igualmente cabe destacar su eclecticismo que iba del heavy psych al pop psicodélico jazzeado y de la psicodelia con tintes latinos al rock ácido, sin tener que caer en barroquismos fuera de lugar o en experimentación excesiva y carente de dirección, igualmente cabe destacar que la ejecución de la banda es magistral, por lo que tenemos un disco muy completo y creativo que definitivamente está entre los mejores que he escuchado de la psicodelia gringa en general.

El disco comienza con You're Not There, una canción de heavy psych un tanto dramático muy típico de la época que me trae a la mente a muchas bandas, entre ellas a una rarísima originaria de Indianapolis, Indiana llamada Brand X que solo sacó un sencillo en 1970 con un par de refritos, entre ellos el de Come On Home del grupo de garage rock pre-Aorta The Exceptions, pero con la diferencia de que Listening sí componían sus propias canciones y además lo hacían de manera extraordinaria, ya que noto bastante elaboración sin caer en ningún vicio de la época, igualmente cabe destacar que el trabajo de órgano es espléndido, la sección rítmica cuadrada y con mucha fuerza, básicamente la encargada de darle la pesadez a la canción y por supuesto no puede faltar la guitarra psicodélica en el solo. Espléndida apertura y como dato extra, esta canción fue versionada por el grupo neoyorkino de heavy psych Odyssey en su debut y único disco de estudio titulado Setting Forth, editado tan solo un año después.

Le sigue Laugh At The Stars, que contrastando con el heavy psych de la canción anterior, aquí tenemos un delicado y fino pop psicodélico con tintes barrocos, excelentes armonías vocales, enormes cantidades de hammond y clavecín y la guitarra psicodélica obligatoria, esta canción es un excelente ejemplo de cómo la escena de Boston, en contraste con las de San Francisco, Los Ángeles, Texas y Detroit, tuvo un sello mucho más fino y enfocado a la cerebralidad melódica. Extraordinario.

El pop psicodélico fino sigue en 9/8 Song, pero esta vez combinado con algo de cool jazz, y aunque aquí no hay guitarra eléctrica, sí hay acústica, y en lugar de hammond, hay piano y vibráfono. El cruce perfecto entre The Freeborne, los Spiders y Bob Smith. Belleza.

Stoned Is es el clásico indiscutible de la banda, ya que se trata de su canción más conocida y además de todo, estamos ante uno de esos temas obligatorios para todo el que se diga fan o hasta "conocedor" de la psicodelia, pues es un tema de rock ácido con una sonoridad exquisitamente "pacheca" como diríamos aquí en México, en donde la mezcla de hammond con guitarra se encargan de darle toda esa sonoridad psicodélica tan especial así como la voz que me recuerda a Girl de los Beatles por los sonidos de inhalación. Obra maestra.

Forget It, Man! Es psicodelia más estándar que me recuerda a Lee Michaels (Carnival of Light) en sus momentos más ácidos por su combinación de órgano hammond con clavecín. Excelente.

I Can Teach You es rock ácido souleado con una ocasional sección de metales, un trabajo magistral de teclados y de nuevo, esa infaltable guitarra psicodélica en el solo. Excelente.

Volvemos al pop psicodélico en So Happy, que a mí en lo personal me suena a una combinación entre The Lovin' Spoonful, Love y los Cowsills que incluye un solo de guitarra que me suena al mejor Armando Nava en el Cambia, cambia. Este es el tema más "comercial" de todo el disco, pero no por eso carente de calidad, ya que este tema es también espléndido.

Cuando es un tema muy curioso e interesante que suena muy similar a lo que ya hacían en ese tiempo los angelinos Sweetwater con su combinación de pop psicodélico con elementos latinos y barrocos así como también vuelvo a notar que se adelantan tanto al sonido de Bob Smith en su obra maestra The Visit de 1970 como a la época de War con Eric Burdon y por si no fuera poco, incluyen una pequeña parte de letra en Español, que a pesar de que no está tan bien pronunciado, se agradece que lo hicieran. Espléndido.

Baby: Where Are You? Es tal vez el tema que más me recuerda a San Francisco, particularmente a Quicksilver Messenger Service, es decir, es un tema de rock ácido, aunque también cabe destacar que es probablemente una de las más psicodélicas del disco junto con Stoned Is y See You Again, porque incluye partes atascadas de phaser, incluyendo un breve solo de batería y por si no fuera poco, también incluye interludios jazzísticos que de nuevo me traen a la mente a sus contemporáneos The Freeborne o a los Spiders de mi país. Obra maestra.

Fantasy es un breve interludio de teclados con un sonido bastante tenebroso, pero que muestra la maestría de Michael Tschudin como tecladista.

El disco cierra con broche de oro con See You Again, un tema de puro rock ácido guitarrero, enérgico hasta la médula y aunque prácticamente no tenga letra alguna, el hecho de que Michael Tschudin esté repitiendo una y otra vez el título de la canción como si se tratase de un mantra, se me hace algo tan bellamente típico de la época y por si no fuera poco, esta canción tiene un solo de bajo y otro de batería. Otra obra maestra.

Si eres fan de la psicodelia gringa como yo, este disco es de escucha obligatoria, pues junto con los álbumes de Ill Wind, Ultimate Spinach, The Freeborne, Beacon Street Union, The Fort Mudge Memorial Dump, The Art of Lovin', Ford Theatre, Earth Opera, entre otros, este es uno de los mejores trabajos hechos de Boston, Massachusetts y uno de los mejores de toda la psicodelia gringa.

6 ene 2024

The Conqueroo - From The Vulcan Gas Co. (1987)

 
Muy feliz y próspero 2024 tengan todos ustedes, la razón por la que no pude actualizar el blog en las últimas semanas del 2023 fue porque intenté aplicar mi viejo modelo de trabajo bloggero en el que solía planificar todo desde una semana antes de publicar algo, y podía hacer eso precisamente porque antes solía invertir bastante tiempo en escuchar música, y por lo tanto, a la hora de seleccionar el disco semanal, podía darme el tiempo de ir escribiendo la reseña en el transcurso de la semana y además, de subir el disco, ahora, lamentablemente eso ya no funciona para mí, porque generalmente estoy ocupado en otra cosa y el tiempo ya no me rinde para trabajar como antes, por lo que hice el intento desesperado de crear dos encuestas para que ustedes, los lectores, votaran el disco de la semana, pero lamentablemente tampoco funcionó para mí, ya que eligieron un disco que no había escuchado lo suficiente como para reseñarlo, por lo que decidí descansar de mis esfuerzos en vano y por lo tanto, si no hubo post navideño, tampoco hubo de fin de año, y ahora que Enero está empezando, una de mis metas es precisamente volver a dedicarle tiempo a la música con el fin de hacer que esto vuelva a funcionar y además, hacer que la bonita tradición bloggera de subir piratería con extensas reseñas no muera.

The Conqueroo fue una de las primeras bandas psicodélicas en surgir del estado de Texas junto con los 13th Floor Elevators -que también eran de Austin-. Formados a fines de 1965, tomaron su nombre de una frase de la icónica Hootchie Cootchie Man del gran Muddy Waters ("John, the conqueror root"), pero con una deformación y su primera alineación estuvo conformada por Powell St. John -un personaje mítico porque justamente también colaboró como compositor con los 13th Floor Elevators- en la voz, armónica y kazoo "electrificado", el bajista Ed Guinn, el guitarrista Bob Brown y el baterista Tom Bright. The Conqueroo serían uno de los 2 grupos que aparecieron en el primer cartel musical psicodélico de Texas que data de Enero de 1966 y pronto el grupo se convertiría en uno de los más destacados e importantes de la escena, al punto que sería también uno de los grupos que inauguraron el Vulcan Gas Company -la primera sala de conciertos psicodélica de Texas- en 1967.

A pesar de la importancia capital y su prestigio como grupo, Texas siempre ha sido un estado conservador y retrógrada, y cuando la contracultura llegó a dicho estado, la primera reacción que hubo fue que aquellos greñudos con ropas coloridas, que tocaban música "rara" y consumían sustancias ilícitas, eran una "amenaza comunista en contra de los sagrados valores cristianos", por lo que grupos como los 13th Floor Elevators, The Conqueroo, Shiva's Headband, Red Krayola, The Golden Dawn, Bubble Puppy, entre otros, terminaran siendo perseguidos por la policía local, así como también los hippies locales terminaron siendo perseguidos o en reprimendas policiacas de manera idéntica a lo que sucedió en México después del Festival de Avándaro, cuando llegaba la tira a acabar con las tocadas en los hoyos fonquis y arrestaban a los hippies para raparlos y hasta tirarlos en lugares abandonados o meterlos presos, lo que provocó que The Conqueroo fuese un grupo inestable en cuanto a su alineación, pues por ejemplo, Powell St. John no pudo ser un miembro de tiempo completo y terminó emigrando a San Francisco, California a formar el grupo de blues Mother Earth, por lo que fue reemplazado por el guitarrista Charlie Prichard, igualmente el baterista Tom Bright terminaría saliéndose en el otoño de 1967 y sería reemplazado temporalmente por Daryl Rutherford que se saldría en 1968 para ser reemplazado por el baterista de jazz Gerry Storm -quien había estado con The Blue Crew-, sin embargo, tampoco duraría mucho, pues el grupo estaba cansado y atemorizado de terminar encarcelados o metidos en un hospital psiquiátrico como le pasó a su amigo Roky Erickson, por lo que decidieron partir a San Francisco, California y ahí conocieron al baterista Alvin Sykes, que los acompañó hasta su separación en 1970, y a pesar de que parecía prometedor su futuro ahí, terminó siendo un fiasco, pues lo que pudo haber sido su tocada para darles notoriedad terminó siendo un fiasco que les brindó mala reputación y por si no fuera poco, el grupo fue numerosas veces asaltado por los delincuentes del barrio en el que vivían, robándoles todo su equipo, cosa que finalmente hizo que terminaran separándose en 1970 en términos amigables, no obstante, Bob Brown formaría a una nueva encarnación del grupo en 1973 con la que se regresaría a Austin, Texas, pero de nuevo, la mala suerte les jugó en contra, pues el Vulcan Gas Company no existía más desde Agosto de 1970 y el Armadillo International Headquarters era un recinto más orientado al country rock que a la psicodelia, por lo que el grupo pronto tuvo que cambiar de nombre y de estilo, haciéndose llamar Texoid y tocando un soft rock al estilo de Steely Dan, cosa que no terminaría de cuajar y que finalmente aburriría a Bob Brown, quien terminó dándole fin al grupo a fines de los 70's.

From The Vulcan Gas Co. es una recopilación editada en 1987 por la disquera 5 Hours Back, la cual está conformada por diversas grabaciones del grupo hechas entre 1967 y 1968, entre ellas las 3 canciones de la autoría del bajista Ed Guinn que se grabaron en los estudios Pacific High Recording de San Francisco, California en 1968 que abren el álbum, el sencillo de 1968 grabado para la disquera texana Sonobeat en vivo desde el Vulcan Gas Company y otras grabaciones en directo que fueron grabadas en distintas fechas, cosa que hace de este disco algo muy completo e interesante para los que en verdad quieran conocer la psicodelia texana y a sus grandes exponentes.

El estilo de The Conqueroo se podría definir como un cruce entre el sonido texano y el sanfranciscano, pues por un lado tenemos ese sonido crudo y garagero pero siempre lisérgico que los relaciona con otros grupos texanos de la época como los 13th Floor Elevators, The Golden Dawn, Shiva's Headband, los Moving Sidewalks y American Blues, y por el otro tenemos los largos y ácidos jams guitarreros con bases de blues, folk, rhythm and blues y jazz que los conecta con grupos como Linn County, Mad River, Frumious Bandersnatch y Quicksilver Messenger Service, por lo que podríamos decir que The Conqueroo fue un grupo distintivo para la escena de Austin, Texas y es una lástima que al tener que huir a San Francisco debido al autoritarismo texano, no hayan pegado ahí, teniendo en cuenta que por su estilo, pudieron haberse vuelto muy populares en dicha escena al igual que A.B. Skhy, Linn County, Mad River, Devil's Kitchen o H.P. Lovecraft, grupos que ni siquiera eran originarios de California, pero que una vez que se instalaron en San Francisco, lograron gozar de bastante popularidad local.

El disco empieza de manera guitarrera con Passenger, la cual fue grabada en 1968 en los estudios Pacific High de San Francisco, con el nuevo baterista Alvin Sykes, y es notoria la influencia sanfranciscana, pues la composición me recuerda a Linn County y su rock ácido blueseado y souleado, mientras que la guitarra suena más al gran Stacy Sutherland en su momento más creativo (Easter Everywhere, Bull of The Woods) y la voz es una especie de cruce extraño entre Lawrence Hammond de Mad River y Spencer Perskin de la Shiva's Headband. Temazo.

Otro tema grabado en San Francisco es Banana and The Cat y que de nuevo, suena a cuánto absorbieron la influencia local, pues esta vez suenan a un cruce bastardo entre Mad River, los 13th Floor Elevators y los Mothers of Invention, pues se trata de una composición un tanto sombría y algo disonante que bien pudo haber estado en el primer disco de Mad River o en el Freak Out! de Frank Zappa. Extraordinario.

Words Are Not as Strange es otro de los temas grabados en San Francisco, esta vez es un blues lento de corte psicodélico, más deudor del blues de Chicago que del de Texas a mi parecer, pero con una omnipresente guitarra psicodélica.

1 to 3 vuelve al rock ácido guitarrero, esta vez con una grabación en vivo en el Vulcan Gas Company en 1968, y es un gran ejemplo de la gran energía que tenía la banda en sus directos, donde también hacían largos jams lisérgicos, haciendo eco de grupos sanfranciscanos como Quicksilver Messenger Service, Frumious Bandersnatch, Moby Grape, Jefferson Airplane, entre otros. Obra maestra.

Walking Blues de Robert Johnson ha sido versionada por miles de artistas y grupos, pero las versiones más memorables e interesantes son las de la Paul Butterfield Blues Band, Quicksilver Messenger Service y esta de The Conqueroo, que a pesar de que no sonó tan psicodélica como las otras, los arreglos son interesantes y la ejecución excelente.

Midnight Hour es una versión de In The Midnight Hour de Wilson Pickett, la cual es una de las canciones más texanas del disco, curiosamente, porque los arreglos me recuerdan muchísimo a los 13th Floor Elevators y su Monkey Island, e incluso la guitarra me suena a ese primer Stacy Sutherland tan influenciado por el surf y el rhythm and blues. Espléndida.

Con I've Got Time de nuevo estamos frente a un tema de rock ácido bastante largo y guitarrero, con una duración de más de 8 minutos, que me recuerda muchísimo a los Them y su obra maestra Time Out, Time In For Them! de 1968, aunque también noto ecos de la ruidosa guitarra de James Gurley de Big Brother and The Holding Company. Obra maestra.

Get Out of My Life, Woman es uno de los estándares del rhythm and blues más versionados de la historia y que tuvo un especial cariño entre las bandas psicodélicas gringas, destacando especialmente a Iron Butterfly, quienes versionaron la canción en su debut Heavy de 1968, y aquí The Conqueroo hicieron otra versión, que suena más a rock ácido blueseado. Esta canción fue grabada en el mismo concierto que la anterior. Espléndido.

I Think About It se supone que fue grabada en vivo en el Vulcan Gas Company en 1967 o 1968, aunque curiosamente, tiene una mejor calidad de sonido que las anteriores. Aquí el grupo aún no sonaba tan sanfranciscano y más bien sonaba a un típico grupo texano de garage rock psicodélico, aunque con un énfasis mayor en la guitarra que otros de sus contemporáneos. Excelente cierre.

En una carpeta extra puse las versiones del sencillo de Junio de 1968 para Sonobeat Records de I've Got Time y 1 to 3, que según están grabadas en vivo en el Vulcan Gas Company, pero en realidad ese recinto simplemente fue usado como estudio temporal para grabar este sencillo, de ahí que la calidad de sonido sea muy superior a la de las versiones del LP. También cabe destacar que son versiones mucho más cortas que las presentes en el LP, que esas definitivamente sí fueron grabadas en vivo, de ahí que la calidad de sonido deje tanto que desear.

Aunque sea un disco un tanto inconsistente en general, ya que se trata de una recopilación construida desde distintas fuentes y por lo tanto, la calidad de audio varíe muchísimo, las canciones en general son excelentes y la interpretación del grupo es enérgica y llena de vida, aunque eso sí, me atrevo a decir que en las cuestiones creativas no lograron estar al mismo nivel que los 13th Floor Elevators o que los grupos sanfranciscanos de la época, no obstante, From The Vulcan Gas Co. es un documento muy interesante y totalmente recomendado para los fanáticos de la psicodelia gringa.